Renée Ballard empieza muchas investigaciones, pero no termina ninguna, porque cada mañana entrega sus casos a los detectives del turno de día. Sin embargo, una noche le tocan dos casos de los que no quiere desprenderse: la brutal paliza a una prostituta que es abandonada y dada por muerta en un aparcamiento, y el asesinato de una joven camarera durante un tiroteo en un club nocturno.Ballard está decidida a no renunciar a los casos al amanecer. Contra las órdenes y los deseos de su propio compañero, se dedica a ambas investigaciones de día mientras cumple con su turno de noche. Los casos se complican y acercan a Ballard a sus propios demonios y a la razón por la que no renunciará al trabajo por más dificultades que le ponga el departamento.Renée Ballard empieza muchas investigaciones, pero no termina ninguna, porque cada mañana entrega sus casos a los detectives del turno de día. Sin embargo, una noche le tocan dos casos de los que no quiere desprenderse: la brutal paliza a una prostituta que es abandonada y dada por muerta en un aparcamiento, y el asesinato de una joven camarera durante un tiroteo en un club nocturno.Ballard está decidida a no renunciar a los casos al amanecer. Contra las órdenes y los deseos de su propio compañero, se dedica a ambas investigaciones de día mientras cumple con su turno de noche. Los casos se complican y acercan a Ballard a sus propios demonios y a la razón por la que no renunciará al trabajo por más dificultades que le ponga el departamento.«Una de las mejores novelas de Connelly, que anticipó el escándalodel acoso sexual. Ballard es un gran personaje: una policía valiente ymuy inteligente».
Guillermo Altares, El País
Michael Connelly presenta su nueva protagonista: Renée Ballard, unaprometedora detective de la policía de Los Ángeles, relegada al turno denoche por denunciar a su superior por acoso sexual.